EL CURADOR INTERNO



Hay una parte de nuestro ser que guarda la información de origen, incontaminada por la vida y las relaciones. Es un espacio interior, allí donde reside tu curador interno. Tienes el poder de conectar conscientemente con ese aspecto superior de ti mismo. Allí moran todas las respuestas. Allí están las claves. Allí, también están guardados los dones que aún no has desarrollado. Tus más preciados talentos, provienen de ese lugar. También los que no valoras porque ya están logrados, y son de una simpleza tan grande, te demandan tan poco esfuerzo que a veces hasta pasan ignorados durante mucho tiempo. Llegó el momento de contactar con lo más profundo para darle salida a esa parte especial de ti que necesita expresarse y que tal vez ayude a otros a tener una mejor vida. Puede actuar en todos los niveles de tu vida que aun se hallen bloqueados o que no fluyan de una forma simple y armoniosa: la salud de tu cuerpo físico, tu equilibrio emocional, la tranquilidad de los pensamientos o la entrega a lo superior, como sea que lo sientas.

Ahora te doy una serie de aspectos a tener en cuenta:

En el interior de tu ser se halla la verdad de quién realmente eres.
Tu Alma te da mensajes todo el tiempo, avisándote cada vez que niegas esta verdad, o la olvidas: son los malestares, accidentes, sentimientos negativos…
Cuando estás en orden, alineado con tu esencia, la vida es bella y disfrutas de cada instante en forma especial.
Cada obstáculo, cada enfermedad, situación dolorosa, o las angustias y penas, están marcando que hay desconexión con tu propia energía y con la Energía Divina.
Puedes colocarte como testigo de tu propia vida y observar: Cuales son los aspectos de tu vida que no fluyen. Cuales son los temas que aún tienes pendientes de tu pasado. Qué cosas te mantienen preso y no puedes dejar.

Identifica toda inarmonía que haya en tu vida y dale un nombre (así cuando hagas el trabajo interno, sabrás a qué te refieres).
Tal vez sería conveniente que te tomes algunos días para observarte y anotar!
Cuando te sientas preparado para continuar, te sentarás en un lugar tranquilo, tomarás unas respiraciones en forma consciente y comenzarás a ir hacia adentro.

Ejercicio para reconocer el Curador: interno

Imaginas que recorres un camino para dirigirte hacia el interior de ti mismo, y pondrás atención en qué obstáculos se interponen para llegar a la cueva donde reside tu Curador interno.

Ejemplos:

Si hay piedras o vallas, asócialas a tu historia personal. ¿Qué hechos de tu vida los viviste de esa forma?
Si hay lluvias, ríos o arroyos caudalosos, pueden ser emociones que aún están guardadas.

Si hay vientos o huracanes, tendrán relación con pensamientos, sistemas de creencias que te juegan en contra.
Si lo que debes atravesar son desiertos, son partes tuyas que no recibieron el amor necesario.

Irás recorriendo ese camino, reconociendo obstáculos que no te impedirán llegar, porque tu determinación y voluntad, son las necesarias para superar lo que sea. Si en algún momento se te hace difícil puedes pedir la ayuda de tu ángel o de los Seres de Luz que vibren en sintonía con tu Alma.
Una vez en la Cueva de tu Corazón, le pedirás a tu Curador Interno que obre en ti para comprender e integrar cada uno de los aprendizajes que te dejaron los obstáculos. Allí en presencia de este aspecto elevado de tu ser, tal vez puedas reconocer el regalo que cada situación trajo a tu vida. Y si aún no puedes, deja abierta esa posibilidad de comprensión para cuando sí puedas comprender.

Imagina que en cada célula de tu cuerpo brilla un punto de luz. Que esta luz irradia, inundando todo tu cuerpo y su alrededor. Siente la energía de la curación irradiando a cada aspecto de tu ser que necesite ser sanado. Siente la Paz, el Equilibrio y el Amor. Disfrútalo… y luego, vuelve renovado, trayendo contigo este cambio, este crecimiento, para hacer los cambios necesarios, guiado por la Luz y el Amor

Comentarios

Entradas populares